El motivo principal de la visita a Bembibre del presidente de la República de Cabo Verde, Jorge Carlos Fonseca, fue compartir una jornada con sus compatriotas. De hecho, la primera parada fue en la sede de la asociación Amilcar Cabral de Bembibre donde Fonseca inició esta toma de contacto con un brindis, con vino de El Bierzo, para celebrar este interés por una de las comunidades más importantes del país con más de 600 caboverdianos en la demarcación del Bierzo Alto.
La comitiva de Cabo Verde hizo parada para comer en un restaurante propiedad de una bembibrense de orígenes caboverdianos, y por la tarde aprovecha la jornada para conocer la Casa de las Culturas y el Museo, para terminar en el Teatro Benevivere, donde está programado un espectáculo de música tradicional.
No es la primera visita de Jorge Carlos Fonseca a Bembibre, pero sí es la primera en su condición de presidente de la República lo que hace cambiar todo el contexto. El mandatario caboverdiano quiere potenciar la unidad de las comunidades caboverdianas en el extranjero, con más motivo cuando se trata de una población tan dispersa. En España El Bierzo y Laciana son dos enclaves importantes.
El colectivo caboverdiano siempre ha vivido con especial emoción cualquier visita de cualquier cargo político, candidato o del propio Embajador, y con más motivo en este caso cuando se trata de un alto cargo que es considerado como “símbolo nacional de Cabo Verde” (como definió el propio Fonseca el cargo de presidente de la República), lo que ha hecho más que evidente el ambiente de fiesta de los vecinos caboverdianos que quisieron acompañar en diferentes momentos a la comitiva de su país.
Agradecimiento de las asociaciones de caboverdianos
Las comunidades caboverdianas expresaron su satisfacción por la visita del presidente de la República. A nivel local en Bembibre, Elisio Honorato Moreira Pinto, presidente de Amilcar Cabral, e Irineu Lima, presidente de Cabobercianos Unidos, trasladaron a Jorge Carlos Fonseca su agradecimiento por su visita a la villa.
Y muy concretamente le transmitieron su situación y sus preocupaciones. Pinto expresó que los problemas de la comunidad caboverdiana están relacionados con la situación económica general. Ya no de aquellos que en su momento llegaron para trabajar en la mina, sino de sus hijos. “Pedimos que nos apoye, con los que vienen detrás”, y en concreto aseguró que “nosotros tenemos la vida resuelta pero mis hijos no”.
En la misma línea Irieu Lima transmitió esta preocupación por la situación general, y le pidió “más contacto hacia los caboverdianos que estamos fuera”.
En cualquier caso no ocultaron su satisfacción por la plena integración de la comunidad caboverdiana: “aquí nos sentimos como si fuéramos de la casa con el tiempo que llevamos”.
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