Un incendio calcinó este viernes la buhardilla de un chalet adosado en el acceso a Villaverde de los Cestos. Y lo hizo hasta en dos ocasiones. Primero, por la tarde cuando se originó el fuego en la planta superior por causas desconocidas, y por la noche, una vez se había decretado ya su extinción, se reavivaron las llamas.
Pasadas las 17.30 horas el propietario llegó a la vivienda y apreció una fuerte humareda que procedía de la parte superior. Al final fue necesaria la presencia de los Bomberos de Ponferrada para sofocar las llamas, que pudieron iniciarse por un cortocircuito. El incendio se dio por extinguido poco antes de las 20 horas.
La familia decidió desplazarse a la casa de unos familiares ya que la vivienda afectada por el incendio no tenía luz y no reunía condiciones de habitabilidad. Sin embargo, esa misma noche sobre las 23 horas los vecinos apreciaron que las llamas se habían reavivado.
Antes de que llegaran los bomberos conectaron las mangueras de la Junta Vecinal de Villaverde a la boca anti incendios que está ubicada justo enfrente de la vivienda. Un grupo de vecinos y los agentes de la Guardia Civil se adentraron hasta la buhardilla para evitar la propagación de las llamas. Incluso, según relataron varios vecinos que contribuyeron en las labores de extinción, la virulencia de las llamas puso en peligro no sólo a esta vivienda sino a otros chalets adosados.
En el momento en que llegaron los bomberos completaron la extinción del fuego. En esta segunda visita procedieron a inspeccionar minuciosamente la zona para asegurar que ya no había riesgo, con más motivo para las casas colindantes habitadas.
Varios vecinos reprocharon que hubieran dado por extinguido el incendio inicial cuando todavía quedaba un foco que provocó la reactivación posterior. Una de las hipótesis es que una chispa oculta entre materiales de la vivienda o enseres calcinados se hubiera avivado por la corriente al estar las ventanas abiertas.
Trabajador de Alto Bierzo que lleva tres meses sin cobrar, sin derecho a paro y sin seguro
El propietario de la vivienda es uno de los trabajadores de Alto Bierzo que lleva tres meses sin cobrar. Detrás de todo ello está la decisión del administrador concursal de no abonar media nómina de noviembre y la extra (que pretende que asuma la empresa adjudicataria, si la hubiera) así como la paralización de actividad desde que comenzó 2015.
Pero detrás de decisiones de este tipo hay mucho más que números. En este concreto caso hay detrás una familia de cinco personas, que ya no percibe ingresos. Es más, el trabajador no tendría incluso derecho a paro porque ya se consumió en el correspondiente Expediente de Regulación de Empleo, y sólo podría optar a una ayuda familiar de 426 euros.
Sin ingresos, uno de los gastos que eran prescindibles –no por otra cosa sino porque, como explicaba el propietario de la vivienda, no lo podían pagar- era el seguro de la vivienda. No hubo fortuna en el trabajo, ¿quién iba a pensar que se iba a quemar la casa?
Ahora, se enfrentaría a una posible reclamación de los Bomberos de Ponferrada por la extinción del incendio que tan siquiera puede pagar. Por supuesto, sin tener en cuenta que la reparación de los desperfectos tendrían que esperar a que las cosas cambien.
Por lo pronto el alcalde pedáneo de Villaverde de los Cestos, Alfonso Pérez, que además es vecino de la familia afectada y uno de los que participó activamente en la extinción, aseguró que mediará en el Ayuntamiento de Congosto –término municipal donde se encuentra la vivienda- para que se haga cargo de los gastos por extinción.
