El Servicio de Protección de la Naturaleza (SEPRONA) de la Guardia Civil ha procedido a la imputación dos personas, cuyas identidades responden a las iniciales de de J.M.A. de 65 años de edad y vecino de Ponferrada, y de M.P.B., de 64 años y vecina de la localidad de Caboalles, por presuntos delitos contra los recursos naturales y el Medio Ambiente, como responsables de dos empresas relacionadas con el trasporte de residuos.
Los implicados pertenecen a dos empresas bercianas dedicadas al transporte de residuos, los cuales procedían al vertido de estos de manera irregular. El modus operandi utilizado consistía en retirar los contenedores de residuos e, incumpliendo su obligación de entregarlos a un gestor autorizado, vertían los mismos en una propiedad privada acondicionada en un primer momento para relleno con materiales pétreos, entendiendo por tales materiales naturales como limos, arcillas, gravas y cantos. El dueño de esta propiedad cobraba a los transportistas de residuos una cantidad muy inferior a la que deberían pagar si los mismos se entregaran en una planta autorizada como esta legislado, de esta forma se producía un beneficio económico para el propietario de la finca y también para el transportista de residuos que evitaba de esta forma el pago más elevado de la gestión de los residuos.
Estos vertidos, en total unas 4.500 toneladas, se echaban sin ningún tipo de control previo de separación de materiales, mezclados incluso con otro tipo de residuos que tienen un tipo de gestión específica con el consiguiente perjuicio y riesgo para el Medio Ambiente.
La legislación actual obliga al traslado de este tipo de residuos a una instalación de tratamiento autorizada para su posterior valorización o eliminación de acuerdo con la Ley 22/2011, de Residuos y Suelos Contaminados.
Esta actuación forma parte de las “Operaciones Reciclajes”, llevadas a cabo durante el ultimo año por el Seprona, un total de cuatro, con 14 personas detenidas e imputadas y más de 11.500 toneladas de residuos vertidas ilegalmente.
